El manejo de suelo en el cultivo de piña es una parte clave para implementar buenas prácticas agrícolas y así garantizar la sostenibilidad  en  la producción. Antes de poner en marcha un buen plan agrícola, extienda e involucre a los colaboradores de la finca o empresa para qué comprendan muy bien los procesos a seguir.

Uno de los pasos principales es conocer el historial del suelo donde establecerá el cultivo de piña , así descarta la posibilidad de contaminación por usos anteriores como: botadero de basura o desechos tóxicos, sitio de manejo de desechos sanitarios, actividades relacionadas a la minería, botadero de residuos industriales, uso abusivo de químicos.

Además de verificar si hay animales de granjas en los terrenos cercanos, y el grado de erosión y degradación del suelo, vulnerabilidad ante sequías e inundaciones, cultivos anteriores y rotación de los mismos.

Si algunas de estas condiciones reflejan algún nivel de peligro o vulnerabilidad, siga los siguientes pasos de control y prevención, de acuerdo a las clases que establecen la determinación de la capacidad de uso de las tierras de Costa Rica. Recuerde el manejo del suelo en el cultivo de piña tiene que basarse en buenas prácticas agrícolas.

Clase 1:

• Levantamiento topográfico.
• Estudios de suelo.
• Planificación agroconservacionista de fincas.
• Labranza superficial.
• Rotación de cultivos.
• Fertilización y enmiendas minerales.

Clase 2:

• Canal de guardia.
• Canal de infiltración.
• Labranza profunda.
• Labranza y siembra de contorno.
• Roturación profunda.

Clase 3 y 4:

• Acequía de laderas.
• Canal de desviación.
• Barreras vivas.

Clase 5, 6 y 7:

• Levantamiento topográfico.
• Estudios de suelos.
• Planificación agro conservacionista en fincas.
• Canal de guardia.
• Fertilización y enmiendas minerales.
• Enmiendas orgánicas.

Es clave usted conozca las condiciones de los terrenos de fincas vecinas y disponer de la siguiente información: dirección e intensidad del viento, calidad del agua y tránsito de vehículos, a la vez identifique si existen los siguientes riesgos por contaminación:

-Presencia de animales domésticos.

-Movimiento de animales.

-Almacenamiento de estiércol o abono orgánico no tratado.

-Presencia de granjas.

-Aplicación de plaguicidas.

• Prevenir el acceso de animales domésticos al terreno de cultivo, colocando cercas, barreras vivas, corrales o ahuyentadores.
• Colocar barreras vegetativas para evitar contaminación por atomizaciones según las reglas vigentes.
• Cortar la maleza para evitar el tránsito de ratas y reptiles, así mismo mantener la finca libre de malezas.
• Sembrar plantas que produzcan néctar que atraiga insectos facilitadores del control de plagas y biodiversidad. Estas barreras vivas ayudan a evitar el ingreso de animales.
• Colocar señales preventivas donde se establece el proceso productivo.
• Si se presenta peligro de contaminación, abrir zanjas en la zona de producción.
• Podar y limpiar los linderos para evitar la proliferación de plagas.

Recuerde que debe asesorarse claramente sobre las condiciones del terreno para conocer el tipo de suelo del área de cultivo y así aplicar otras medidas esenciales.